top of page

¡Pobres criaturas depravadas e insignificantes!

Foto del escritor: Felipe Chavarro PolaníaFelipe Chavarro Polanía


"Te he amado, pueblo mío, con amor eterno.

Con amor inagotable te he atraído hacia Mí". Jeremías 31:3

El amor de Cristo es inagotable.

No es una pasión de Su humanidad, sino una perfección de Su divinidad.

Siempre ha existido y siempre ha amado a su pueblo.

Su pueblo. . .

siempre tuvo un lugar en sus pensamientos,

siempre ha estado ante Sus ojos,

y siempre ha sido amado por Él.

Él los ha amado desde que los conoció, y los conoció desde la eternidad.

Su amor recorrió las ilimitadas edades de la eternidad pasada, y se fijó en los pobres pecadores que iban a aparecer durante la existencia del tiempo; y habiéndose fijado en ellos, Su amor mantiene su infalible asidero.

Cuando creó la tierra, extendió los cielos y dio Su decreto al mar, Su amor se fijó en Su pueblo. Su bienestar, en conexión con la gloria de Su Padre, era el objeto que buscaba en todas las cosas.

Maravillaos, cielos, y asombraos, tierra. Que Jesús haya fijado Su amor en criaturas tan pobres, depravadas e insignificantes, ¡y eso desde la eternidad pasada!

Cuando meditamos sobre la eternidad pasada, podemos decir en referencia a los períodos más distantes: "¡Mi Salvador me amó entonces! Me amó desde toda la eternidad". ¡Gloriosa verdad! Siempre me ha amado y siempre me amará. Él me amaba. . .

antes de que existieran los ángeles,

antes de que aparecieran los demonios,

antes de que se cometiera el pecado.

Me amó cuando la Divinidad habitaba sola.

¡Oh profundidad!

¡Misterio asombroso!

Parece demasiado bueno para ser verdad.

Pero Dios lo ha dicho, y mi alma se regocijará en ello y le alabará por ello.

Su amor por mí es tan eterno como Su naturaleza, sin principio de días ni fin de años.

De Su amor, como de un poderoso océano, fluyen...

todos los actos de Su poder,

todos los despliegues de Su benevolencia,

todas las manifestaciones de su gracia,

y todas las provisiones de Su evangelio.

Es dulce meditar silenciosamente en el pensamiento de una criatura tan vil e insignificante como yo, que Jehová-Jesús no sólo pensó en mí, sino que me amó eternamente con toda la fuerza de Su Deidad. Me amó tanto que estuvo dispuesto, cuando fue necesario, a tomar mi naturaleza y salvarme mediante su humillación, sus sufrimientos y su muerte.


Versículos bíblicos para respaldar la enseñanza de James Smith sobre el amor de Cristo:

- "Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna." (Juan 3:16)

- "En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados." (1 Juan 4:10)

- "Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos)." (Efesios 2:4-5)

- "Porque estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni lo presente ni lo por venir, ni los poderes, ni lo alto ni lo profundo, ni cosa alguna en toda la creación, podrá apartarnos del amor que Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor." (Romanos 8:38-39)

- "El Señor tu Dios está en medio de ti, guerrero victorioso. Se deleitará en ti con gozo, te renovará con su amor, se alegrará por ti con cantos." (Sofonías 3:17)

45 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

¿Qué te da esperanza?

Nuestro mundo está cambiando constantemente, pero las Escrituras nos recuerdan que nuestra esperanza en Dios nunca cambia. Esta semana,...

Comments


  • facebook
  • twitter
  • linkedin

©2021 by GLOBAL COUNCIL INC. 

bottom of page